Del 16 de octubre al 20 de diciembre de 2015
Como obra maestra del Siglo de Oro español y de la dramaturgia universal de todos los tiempos, El alcalde de Zalamea se resiste a la simplificación. Cada época, cada circunstancia, cada geografía, descubre en ella lo que necesita. La CNTC la ha puesto en pie en tres ocasiones y esta vez propone un nuevo acercamiento, con el afán de continuar desvelando al público lo que se esconde tras las palabras de Calderón.
Es difícil encontrar un texto dramático con escenas tan emocionantes y perfectas. El viaje de ida y vuelta de lo trágico a lo cómico parece una pirueta imposible. La respiración se detiene al avanzar de un lugar a otro, de un conflicto a su contrario, del día a la noche y buscamos tomar aliento en los momentos no tan lógicos que nos permite esta extraordinaria concepción del espacio y el tiempo.
Es una obra sobre el amor porque el autor pone el acento en el desamor. Es una obra sobre la justicia porque predomina la injusticia. Lo es sobre el honor como opinión de los demás, como virtud militar, o como conciencia y dignidad personal y, con demasiada frecuencia y demasiado pronto, hacen acto de presencia el deshonor, el abuso, el fingimiento.
Y ¿qué decir de la excepcional construcción de los personajes? Contradictorios, como siempre en Calderón. También grandes, desenvolviéndose en medio de un turbión que se inició con los primeros versos de la obra, tratando de mantenerse en pie para llegar al final de su vida teatral trasladando al espectador la idea de que, a pesar de todo, la vida sigue.
Helena Pimenta
Lugar: Teatro de la Comedia. Calle Príncipe, 14Es difícil encontrar un texto dramático con escenas tan emocionantes y perfectas. El viaje de ida y vuelta de lo trágico a lo cómico parece una pirueta imposible. La respiración se detiene al avanzar de un lugar a otro, de un conflicto a su contrario, del día a la noche y buscamos tomar aliento en los momentos no tan lógicos que nos permite esta extraordinaria concepción del espacio y el tiempo.
Es una obra sobre el amor porque el autor pone el acento en el desamor. Es una obra sobre la justicia porque predomina la injusticia. Lo es sobre el honor como opinión de los demás, como virtud militar, o como conciencia y dignidad personal y, con demasiada frecuencia y demasiado pronto, hacen acto de presencia el deshonor, el abuso, el fingimiento.
Y ¿qué decir de la excepcional construcción de los personajes? Contradictorios, como siempre en Calderón. También grandes, desenvolviéndose en medio de un turbión que se inició con los primeros versos de la obra, tratando de mantenerse en pie para llegar al final de su vida teatral trasladando al espectador la idea de que, a pesar de todo, la vida sigue.
Helena Pimenta
Fechas: Del 16 de octubre al 20 de diciembre de 2015
Horario: Martes y domingo a las 19 h; miércoles, jueves, viernes y sábado 20 h,
Entradas: De 10 a 24 euros
No hay comentarios :
Publicar un comentario