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El Ayuntamiento de Madrid continúa trabajando para ofrecer contenidos accesibles a través de internet a todos los madrileños. Así, la Biblioteca Digital ha preparado una reconstrucción virtual de la antigua Real Fábrica de Platerías, que estaba al final de la calle Huertas (enlace). Gracias a esta recreación, los usuarios podrán visualizar en sus pantallas cómo era una parte de aquel centro de Madrid hasta 1920.
En 1778, Antonio Martínez creó en Madrid una Escuela-Taller de Platería, con los modelos y maquinaria comprados en París y Londres durante su viaje de estudios realizado con patrocinio real. Tras varios emplazamientos, instaló la fábrica en el paseo Del Prado, en un edificio que responde estilísticamente a las tendencias arquitectónicas que convivían en Madrid a finales del siglo XVIII y que se diseñó para entonar con la arquitectura del Jardín Botánico y con el cercano Museo del Prado. Platerías Martínez supuso el abandono de la producción artesanal por la producción industrial, lo que permitió un abaratamiento en los precios de sus productos y hacerlos, por tanto, más asequibles a la nueva burguesía.
La Escuela adquirió el título de Real Fábrica con Fernando VII, continuando su actividad tras la muerte de Martínez en 1798. Dejó de producir en 1869 y su edificio fue demolido en 1920.
En 1778, Antonio Martínez creó en Madrid una Escuela-Taller de Platería, con los modelos y maquinaria comprados en París y Londres durante su viaje de estudios realizado con patrocinio real. Tras varios emplazamientos, instaló la fábrica en el paseo Del Prado, en un edificio que responde estilísticamente a las tendencias arquitectónicas que convivían en Madrid a finales del siglo XVIII y que se diseñó para entonar con la arquitectura del Jardín Botánico y con el cercano Museo del Prado. Platerías Martínez supuso el abandono de la producción artesanal por la producción industrial, lo que permitió un abaratamiento en los precios de sus productos y hacerlos, por tanto, más asequibles a la nueva burguesía.
La Escuela adquirió el título de Real Fábrica con Fernando VII, continuando su actividad tras la muerte de Martínez en 1798. Dejó de producir en 1869 y su edificio fue demolido en 1920.
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